Como bien sabéis los que nos seguís
en este blog hemos escrito bastante sobre economías emergentes y consideramos que serán
muy importantes en el largo plazo para todos aquellos inversores que queramos
obtener buenas rentabilidades. Hoy me gustaría hablar de las oportunidades que
se pueden presentar en los mercados emergentes y es que, no os lo voy a negar,
esto de invertir en este tipo de mercados me pone bastante, aunque hay que
hacerlo con mucha cautela ya que no conocemos de primera mano lo que sucede en
algunos de estos rincones del mundo. Una solución para solucionar esta
asimetría de información y ceñirnos a nuestro circulo de competencia podría ser invertir en fondos con un gran conocimiento local,
como pueden ser algunos de Franklin Templeton. No estoy recomendando nada,
simplemente doy ideas que pueden mitigar nuestros riesgos.
La gran mayoría de los mortales
consideramos que la inversión en este tipo de países representa riesgos
excesivos para nuestra cartera, pero te voy a proporcionar algunos datos que
quizás te hagan pensar sobre el potencial de tu inversión en este tipo de
mercados. Vamos a por algunos fundamentales económicos. A pesar de la recesión
que sufren importantes economías como Brasil y Rusia, los fundamentales de la mayoría
de economías emergentes han experimentado una drástica mejoría durante la
pasada década. Las reservas de divisas en esta región no han dejado de
aumentar, hasta el punto de que al cierre del tercer trimestre de 2015 los
mercados emergentes en su conjunto ostentaban unos 7,4 billones de dólares en
reservas, un volumen bastante superior a los 4,2 billones mantenidos por sus
homólogos desarrollados en su conjunto. Por otro lado, los mercados
emergentes en general registran unos niveles de deuda pública más holgados en
relación con el producto interior bruto (PIB); en torno al 30% comparado con
más del 100% en el caso de mercados desarrollados. Esto no significa que
algunos gobiernos de mercados emergentes no tengan un volumen de deuda
excesivo, pero considerando la región en su conjunto la deuda es escasa en
relación con el PIB. Estos países han registrado unas tendencias de crecimiento
económico más sólidas que las de mercados desarrollados.
Fuente: Idealista.com
Este tipo de
mercados presentan un considerable potencial sin explotar en términos de
recursos y demografía representando casi el 75% de la superficie terrestre del
planeta y el 80% de la población mundial. Un gran porcentaje de la
población que reside en mercados emergentes es joven y se encuentra en la etapa
de la vida más productiva, lo que proporciona a otras economías más grandes una
fuente de mano de obra barata. Esta región no solo alberga a algunos de los
productores de materias primas agrícolas y mineras más importantes del mundo,
sino que también ofrece una notable fuente de mano de obra y se está
convirtiendo ya en una importante región económica impulsada por el consumo por
derecho propio. Al final, yo siempre me centro en la inversión a largo
plazo y alguno de los mayores riesgos se derivan de sucesos imprevistos,
tanto geopolíticos como financieros. Ante esto, los inversores tienden a
reaccionar de forma negativa y desproporcionada ante las sorpresas, y a menudo
los mercados emergentes son los más castigados en la “huida hacia la seguridad”
que acontece en estas ocasiones. A pesar de lo inquietante que puede resultar
la acentuada volatilidad del mercado, esto es lo que nos gusta a los que
tenemos un marcado sesgo value. Nuestro objetivo es examinar más allá del corto
plazo para hallar e invertir en líderes de crecimiento bien gestionados a
precios que nos parezcan atractivos.
Después de hablar de las
bondades de nuestros queridos emergentes desde el punto de vista económico y
podríamos decir geoestratégico, la verdadera palanca de cambio vendrá de
la tecnología. La masiva penetración de internet en los mercados
emergentes ha provocado que estos países den un salto tecnológico maximizando
la productividad y adelantando a los desarrollados. Por ejemplo, en
China la importancia de las compras por internet es tal que han ideado un
sistema de pagos online muy superior a todos los sistemas tradicionales de
pagos utilizados por la banca. Para ponernos en contexto, Alibaba, en un
solo día, el “Single’s Day”, facturó 17.800 millones de dólares, frente a los
5.000 millones de dólares que se gastaron en Estados Unidos en Black Friday más
CyberMonday. El mercado chino es inmenso, y la actividad por internet está a la
orden del día.
Otro ejemplo de tecnología puntera
que cuenta con la enorme masa crítica de los países emergentes es Wechat. Esta
compañía representa la respuesta china a Whatsapp y a Snapchat y cuenta
con más de 700 millones de usuarios, mayoritariamente en China aunque también se
usa India o incluso en Latinoamérica aunque en menor medida. Su utilización va
mucho más allá que la de Whatsapp usándose para cerrar citas de negocios, pedir
comida en restaurantes, llamar a un taxi, transferir dinero, etc. El ingreso
medio por usuario estimado de WeChat es de 7 dólares, siete veces superior
al de Whatsapp que fue comprado por Facebook en 2014 por 22 mil millones
de dólares.
Quizás el efecto Trump puede
provocar una fuga de cerebros hacia estos países si adopta una postura demasiado restrictiva en materia de inmigración. Recordemos que muchos talentos de
Silicon Valley provienen de países como India y China, lo que podría ser muy
perjudicial para la economía americana aunque sinceramente no creo
que sea así, recordemos que Trump es empresario, no político.
La tecnología china se está
exportando a otros mercados emergentes. La industria de los equipos de
telecomunicaciones China, por ejemplo, ha conseguido una tecnología muy
sofisticada pero más barata que sus competidores europeos, Ericsson y Alstom.
Además China está dispuesta a proporcionar financiación a mercados emergentes
que necesitan invertir de forma masiva en infraestructuras.
Otro de los grandes
motivos para obtener grandes rentabilidades puede ser el gran número de
compañías que existen fuera del radar de los grandes inversores y como advertía
al inicio del post podríamos aprovechar esta situación utilizando vehículos con
equipos locales en búsqueda de buenas oportunidades.
Si nos atendemos al espectro
político, los mercados emergentes están virando políticamente hacia gobiernos más
pro-mercado. La mayor libertad en estos países lleva aparejado un
incremento de los movimientos sociales y las manifestaciones, que en ocasiones
son violentas, pero también promueven el cambio. Cada vez son más conscientes
que pertenecen a un mercado global y deben de adaptarse a ello.
Algunos de los miedos que en mis
charlas emergen sobre invertir en emergentes viene del futuro proceso
de subida de tipos que se producirá en los próximos años en las economías
desarrolladas y sobretodo en Estados Unidos. La historia, sin embargo, nos
muestra que para la renta variable emergente en
periodos de subidas de tipos por parte de la FED, no hay correlación como puedes observar en el gráfico inferior. De
hecho, apelando a la psicología inversora, puede ser positivo para los mercados
porque el ahorrador estadounidense se sentirá más seguro al ver que su capital
obtiene un mayor rendimiento y serán menos reacios a invertir en activos con
más riesgo, como la renta variable emergente.
Fuente: Capital group, Datastream
Como puedes ver hay razones más que
suficientes para poner un ojo en los emergentes ya que presenta un mayor
atractivo que los países desarrollados. Saber ponderar los factores de
riesgos basándonos en el largo plazo nos puede ayudar mucho a no perder la
calma en nuestras inversiones en países emergentes. Son regiones excesivamente
castigada ante determinados eventos. A pesar de lo anterior, existen grandes
negocios que con un análisis adecuado nos puede hacer ganar mucho dinero.
Recuerde los ejemplos de algunas empresas relacionadas con internet en China
con números que quitan el hipo ,pero ojo con los precios que podemos pagar
ello.
Javier Flórez
@FlorezJav